jueves, 31 de diciembre de 2020

Balance del (d)año ~Versión 2020~

 Te veías bien, ¿sabes? Tenía muchas cosas preparadas para ti.

Pero... No.


Año de llantos más que de risas.

Aprender a abrazar con la mirada.

Tiempo de echar de menos.


No todo ha sido malo.

He aprendido a maquillarme los ojos (más o menos), he podido ver esa preciosa inmensidad azul y he podido ver mi reflejo en tus ojos.


No, no estoy preparada para otro año, pero ya quiero que te vayas.

miércoles, 8 de abril de 2020

El 8

Llevamos veintiséis días de confinamiento,
este aislamiento al que no veo fin.
Sin embargo mi cuarentena empezó, sin yo saberlo,
el último día que te vi.

Lo que me hace que no decaiga
es pensar que no es un día más,
siempre es un día menos.
Un día menos para vernos.

Porque hay muchas cosas que ya hemos hecho,
pero... ¿y todas las que nos quedan?
Hay muchas cosas que tenemos que ver y descubrir juntas.
Muchas maletas que hacer y deshacer,
muchos atardeceres que disfrutar
y muchos brillos de sol que hagan tus ojos miel.

Sé que sufres aunque no me lo digas,
que tienes tantas ganas de abrazarme como yo a ti.
Ese abrazo que, sin duda,
será el más importante y largo que nunca haya dado.

No dejes de sonreír,
no dejes de brillar.

Felices primeros ochos.

Te quiero.

martes, 31 de diciembre de 2019

Balance del (d)año. Versión 2019

A principios de este año, no parecía que fuera a ser uno bueno. Pero como se dice siempre: no es cómo se empieza sino cómo se acaba.

Y este en concreto empezó de culo y cuesta abajo. Pero... Una vez que se toca fondo, solo queda una cosa: subir.



Ha habido muchos cambios que parecía que no pasarían. La mayoría de ellos me han hecho más feliz, que al fin y al cabo es lo que importa.

Decidí aparcar mi época de estudiante, aunque no creo que esté terminada para siempre. Como todos los que me conocen saben me gusta aprender, saber cosas nuevas...

Y he sonreído hasta que me ha dolido la cara. Que hacía mucho que no pasaba.

Dos mil diecinueve ha sido un año de quererme a mí misma, de mostrarme atención, de pensar en mí... En definitiva: de ser un poquito egoísta, que falta me hacía.

Ni son todos los que están, ni están todos los que son... Pero gracias a todos por este año.

No te tengo miedo, dos mil veinte.

lunes, 31 de diciembre de 2018

Balance del (d)año ~Versión 2018~

El año pasado, una amiga me dijo que el 2018 iba a ser un buen año, que así lo sentía ella y que me iba a ir bien. No estabas equivocada.

El año no empezó mal, aunque tuvo sus turbulencias. Había que acomodarse a ese nuevo año, como a todos.

Este año me he sentido con más ganas de saber más sobre cosas que creía que sabía (y que no era así).

He conocido a gente que me ha ayudado muchísimo porque ha confiado en mí y espero no haberlos defraudado.
Gente a la que he dejado menos atendida, no aposta, pero que han estado conmigo igualmente.


He reído, he echado de menos, he sufrido, he querido y he hecho lo que he querido, lo que me ha hecho feliz.


El 2019 solo traerá un paso más en el camino, porque me sigue sin importar la meta mientras el camino sea bonito y... lo está siendo.

sábado, 29 de abril de 2017

Gracias

Gracias a ti, por enseñarme que puedo hacerlo.

Gracias a ti, por ver en mí lo que ni yo veo.
A ti, por escucharme y apoyarme sin desvelo.

Gracias por confiar en mí y dejar que yo confíe en ti.
Y a ti, por hacerme ver que también la confianza se pierde con más facilidad que se gana.

A ti, por hacerme llorar de alegría.
A ti, por dejarme formar parte de tu vida.
A ti, que sigues a mi lado a pesar de los pesares.
También a ti, que, sin saberlo, me has has hecho ver que soy más persona de lo que creía.

Gracias a ti, por redescubrirme los pequeños detalles del día a día.
A ti, por obligarme a ser educada.
A ti, por hacer que me supere día a día.

Gracias a ti, por cuidarme estés donde estés.
A ti, por las noches sin dormir.
Y a ti por los desvelos.

Gracias.
Gracias por hacerme ver que sigo feliz conmigo misma.
Que sigo haciendo lo que me gusta.
Gracias, por simplemente estar (... o no).